Red Dress

Se sienta agotado sobre la cama, carajo, pero cómo pudo ser? eso quería decir que cuando se iba de viaje...? y todas las tardes de los miércoles esta desgraciada lo llevaba a la casa? “Es que no tienes vergüenza?” Carmina sonríe de espaldas mientras trata de llorar. Observa por la ventana, el señor Julio, de la pescadería de la esquina, se pone el zapato y mete la camisa dentro de los pantalones. “Tuviste que ser tan agresivo, ese pobre hombre se pudo infartar” Sonríe de nuevo, CONTADOR ASESINA A PESCADERO DE UN SUSTO. “Dale, cuéntame, qué vamos a hacer ahora?” se acuesta boca arriba sobre la cama, la observa, puta barata, es que ni pescado gratis les daba don julio, ni metiéndose a su cama, ni tirandose a su mujer. “No sé” responde ella pensando cómo haría para sonsacarle a don julio un apartamento en el norte de Bogotá. Don julio tenía dinero, esposa y algo de nombre, no se vería bien que abandonara a una dulce niña como ella... no, no bastaría, no se vería bien que abandonara a una dulce niña embarazada como ella, es que si alguna vez había tenido sexo con su marido fue para procrear, pero el infeliz era estéril, si, suena mejor, por lo mismo nadie la culparía de querer tener un hijo de don julio, el tan importante don julio que se veía vital, dulce, amable y amplio.

“podrías irte a donde tu madre si te sientes muy incomoda a mi lado” Podría desaparecer, podría obligarla a partir mientras el recoge todos los ahorros, Matías pascal murió, él podría hacerlo, un cuerpo cualquiera, IMPORTANTE CONTADOR SE SUICIDA POR ENGAÑO DE SU LIBERTINA MUJER CON EL VENDEDOR DE PESCADOS DE LA ESQUINA. Se cambiaría de nombre y se llevaría todo el dineral que había ganado en los últimos años. No había forma en que esa zorra se le llevara la mitad de los bienes. “si, creo que es lo mejor, yo te quiero, pero una temporada donde mi madre nos ayudaría a pensar las cosas” Se dispone a empacar maletas. Nunca regresaría a ese cuchitril donde la había metido, años prometiéndole fincas y cosas decentes, años aguantando sus inseguridades, “es que no sirvo, es que no te merezco” tarado, pues no la merecía en realidad, era un pobre miserable con problemas de inseguridad, ya era hora que sospechara que era una vil puta, que le gustaba el sexo y que no estaba interesada en ser su madre protectora, para eso están las secretarias, esas son sacrificadas. “Me voy a caminar para dejarte empacar tranquila, vuelvo al anochecer, te voy a extrañar anita” Y ahora quién carajos va a cocinar? La mujer de don julio? Sonrie, probaría de los más exquisitos platos, viajaría por todo el mundo, dilapidaría el dinero que ella había planeado gastar de anciana, cuando se arrugara y comenzaran las cirugías. Cuando esa dulce boca se marchitara y los senos se le cayeran... hermosos y redondos senos “si quieres te puedo llevar a donde tu madre”,

Anita levanta los hombros “como quieras” ladea su cabeza hacia un lado mientras pone la mano en su cuello, levanta un poco su vestido rojo, después de todo el problema no es que él fuera mal polvo, conocía todos sus puntos y sus dedos no olían a pescado, el problema es que estaban casados, CASADOS, ante la ley y ante el señor dios padre nuestro que les había arruinado la vida y la diversión y los obligaba a acostarse con secretarias y tenderos malolientes. “me voy” dice él. “Te espero entonces” ella sonriente con unos interiores en las manos.